SOÑAR ...

     Detrás de esta ventana abierta, ofrecida a la luz, con cortinaje de
     tul blanco como la nieve, adornada con caireles azules que 
     al más leve soplo tintinean alborozadas , seducidas por la brisa,
     sueño y sueño ...
     Mi alma, al fin, puede volar ...
     El mar, prendado de las nubes , teje acuerdos con ellas y 
     colorean de azul celeste el confín, con las paletas de un pintor 
     clásico y sereno. Las olas batallan sin cesar , van y vienen ... 
     Con cada aspiración me traen palabras bañadas de belleza,
     preñadas de hermosura. Nacen de mis amigos de la otra orilla
     y llegan a mí despaciosas, unas tras otras.
     El mar, su música, su sabor a sal , su majestuosidad , su soberbia:
     hechizo poderoso. Una gaviota vuela en círculos, chillando, y 
     vaga hasta el borde del mundo.
     Ahora el mar está turbulento, puedo olerlo en mi piel . Me 
     recuerda a mi corazón cuando el loco amor lo visita y las olas de
     la pasión lo arrastran, ciego. poseído de un encantamiento
     huérfano de nombre.
     El viento, en un ligero plañido me susurra al oído la dulzura de la    
     palabra. El nombre de aquel príncipe gitano que llevando su 
     poesía, dulce como la miel , peregrina por el ancho espacio y sus 
     versos flotan en la brisa marina.
     Sueño ... desearía ser un pájaro y así podría ir muy lejos a 
     recoger historias de hadas y duendes , de soles y lunas , de 
     vientos y lluvias ., de flores , de diamantes y gemas preciosas
     jade blanco , jade verde , luces y sombras ...
     Al atardecer, el intenso aroma del sol despidiéndose me impulsa
     al cobijo de la silleta blanca . Allí, mirando el mar , vuelta a 
     soñar, libre, sin vallas, sin tropiezos.
     Mi alma , al fin, puede volar ...