.: REQUIEM PARA EL AMOR

miércoles, 26 de junio de 2013

REQUIEM PARA EL AMOR

Detrás de la ventana azul, ella
furtivamente, miraba volar hacia las nubes altas
los recuerdos vencidos.
Piadoso,
el corazón se arrebujó en un puño
pues no cabía ya en su pecho.
Murió el amor sin avisar
intempestivamente
fue enterrado en el granero
sólo, frío, abandonado...
Nunca más vería la lluvia
los soles, las flores
las dulces mariposas
ni el gorrioncito herido.
Un negro y arrogante tulipán
adornará su tumba
Pero apoyado en el frío mármol
un perrito de ojos húmedos
velará su descanso para siempre.
sin esperar siquiera una caricia.
María del Carmen Názer.

14 comentarios:

MAJECARMU26 de junio de 2013, 5:48
Precioso ese Requiem...solemne y nostálgico...Y ese tulipán negro velando la tumba del amor...Entrañable el perrito de ojos húmedos, que canta soledades...Realmente bello y conmovedor...
...Pero, te recuerdo, que el amor no muere, se queda dormido para despertar de nuevo en cualquier esquina o en cualquier banco, donde sienta la melodía infinita del universo latiendo en el corazón...sonrío.
Mi felicitación y mi abrazo grande por tu sensibilidad y amor a las letras, compañera y amiga.
M.Jesús
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Maite Sánchez-volarela26 de junio de 2013, 7:06
Es un poema estremecedor, tristísimo y muy bien logrado.... Me ha dejado el corazón encojido eso del tulipán negro y el perrito solo... Creo que no hay flor más lúgubre que un tulipán negro...ni perro más triste que sin su amado amo....

.....Me ha dejado el corazón encojido, de verdad....
¡Hermoso requiem! Me lo imagino junto a la Lacrimosa de Mozart ¿Te lo imaginas?

¡Un abrazo disparando tulipanes rojos y amarillos!
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Francisco Espada26 de junio de 2013, 7:48
El amor, como todo lo inmaterial, no muere, tal vez hiberna como un ronco latido inaudible; pero late, late para siempre, a condición de que se le recuerde. Un delicado y bello requien, María del Carmen, como todas las letras que pronuncias, a veces con gemidos.
Besos atlánticos.
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Mos26 de junio de 2013, 9:22
Los seres humanos también estamos hechos de tristezas y penas, de lágrimas y corazones encogidos. No todo es alegría y felicidad rebosante.
Tal vez por eso, de vez en cuando, dejamos escapar nuestra pena entre versos y poesías que fluyen desde ese corazón nuestro que lagrimea. Tal vez por eso, leemos versos tan bellos y sentidos como estos, María del Carmen. Y qué caray, puede que encojan el ánimo pero forman parte de nosotros y nuestras vivencias y sueños inalcanzados.
Sigue escribiendo porque el corazón necesita del consuelo de tus palabras.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
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Evanir26 de junio de 2013, 16:32
Bem aventurado aquele que já consegue receber com a
mesma naturalidade o ganho e a perda, o acerto e o erro,
o triunfo e a queda.
De todas as minhas conquistas a maior delas são os meus amigos,
e amigas.
De sorriso puro no rosto de uma criança.
Acredite na fé, mais força, na esperança e na razão.
Descubra-se , ame-se, perdoe-se!
Viva intensamente
a cada Dia da sua vida.
Que sua noite seja de infinita paz ,
viaje comigo tenho certeza ,
que se sentira muito feliz.
Beijos paz e muito amor pra você.
Evanir.
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Chelo 27 de junio de 2013, 4:02
Y después de leer tu sublime Requiem dejame pensar que el amor nunca muere y que ese perrito lo que hace es velar su sueño en espera del próximo despertar.
Un abrazo
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José Manuel27 de junio de 2013, 9:54
No me gustan los requiem, pero si vienen tan hermosos como éste haré una excepción.

Besos
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